INNOVACIÓN SOCIAL
PROSEDE: acercar los derechos a grupos en situación de vulnerabilidad
Durante las últimas décadas, a nivel mundial, se han dado múltiples cambios derivados de factores sociales, económicos y políticos, ─no carentes de consecuencias─ que representan una serie de retos no solo para las instituciones gubernamentales nacionales, sino también para los organismos supranacionales. En este contexto, las cambiantes formas de producción, nuevos patrones sociales, cambios institucionales, la polarización de la desigualdad económica, el recrudecimiento de la inseguridad en determinadas regiones en el mundo, la migración, así como la injusticia, entre otros factores han comenzado a dejar como resultado una situación de vulnerabilidad social a determinados grupos poblacionales en el mundo; quienes en su contexto o situación se ven debilitados e incapacitados para afrontar, neutralizar u obtener beneficios en su sociedad.
Estos grupos en situación de vulnerabilidad cobran vital importancia dado el anterior contexto. Asimismo, para mejor comprensión, se deben entender como aquellos sectores o grupos de la población que, por condiciones de edad, sexo, estado civil, origen étnico o cualquier otro se encuentren en una situación de riesgo y, por ende, tienen limitantes para participar en la vida productiva, acceder a las condiciones de desarrollo personales y a mejores condiciones de bienestar. Dentro de este marco, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), cataloga entre los grupos vulnerables a las mujeres, niñas, niños y adolescentes, la comunidad LGBTTTI+, personas indígenas, personas migrantes, personas con discapacidad, entre otros.
Es así, como en el marco de un mundo multipolar, en septiembre de 2015 se alcanzó a través de la Asamblea General de las Naciones Unidas la aprobación de la agenda 2030; una agenda civilizadora multilateral entre gobiernos, sociedad civil, sector privado, academia y actores diversos, que pone la dignidad y la igualdad de las personas en el centro de toda acción y llama a cambiar el enfoque del desarrollo, particularmente, de los 193 Estados miembros de las Naciones Unidas. Este suceso representó y representa para la región latinoamericana, la oportunidad para afrontar de lleno la erradicación de la pobreza extrema, la reducción de la desigualdad en todas sus formas, el compromiso de reconocer a todas las personas, alcanzar la paz y obtener prosperidad compartida. Lo anterior, sin perder de vista el objetivo prioritario: encaminarse conjuntamente hacia una sociedad más igualitaria y equitativa.
En este contexto mundial, el gobierno mexicano y las instituciones públicas que lo integran, han adoptado en sus agendas, políticas públicas, programas y acciones gubernamentales, los mecanismos necesarios para dar cumplimiento a los Objetivos de Desarrollo Sostenible ODS y la Agenda 2030. Por su parte, el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), como organismo nacional autónomo, impulsa a través de la Comisión Permanente de Vinculación y Promoción del Derecho, una iniciativa para el ejercicio de los derechos de acceso a la información y protección de datos personales en distintos grupos de población, con énfasis en aquellas personas que se encuentran en situación de vulnerabilidad y/o que habitan en zonas de alta y muy alta marginación: el Programa de Sensibilización de Derechos de Acceso a la Información y Protección de Datos Personales PROSEDE INAI.
El Programa de Sensibilización de Derechos de Acceso a la Información y Protección de Datos Personales PROSEDE INAI es una iniciativa del Instituto surgida en 2015 y desde entonces, se encuentra dirigido hacia organizaciones de la sociedad civil, las cuales fungen como aliadas estratégicas del Instituto, para dar a conocer, promover y difundir los derechos de acceso a la información pública y de protección de datos personales con un enfoque de utilidad social en distintos grupos de población. Lo anterior, a través del financiamiento de proyectos que beneficien a personas en situación de vulnerabilidad y preferentemente se encuentren en zonas de alta y muy alta marginación, a través de la promoción del desarrollo humano y social de los derechos tutelados por el INAI.
De este modo, desde 2015 a la fecha, se han realizado 8 ediciones del programa PROSEDE INAI, en los cuales se han postulado un total de 571 proyectos y se han logrado financiar 102 de ellos; lo cual ha representado una inversión de aproximadamente 17 millones 564 mil pesos de pesos. Asimismo, esta iniciativa ha impactado directamente e indirectamente alrededor de tres millones y medio de personas, favoreciendo a poblaciones de los estados de Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur, Chiapas, Chihuahua, Ciudad de México, Coahuila, Colima, Durango, Estado de México, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Michoacán, Morelos, Nuevo León, Oaxaca, Puebla, Querétaro, Quintana Roo, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tabasco, Tlaxcala, Tamaulipas, Veracruz, Yucatán y Zacatecas. Lo anterior, comprende a 31 estados, 357 municipios y 16 alcaldías de la Ciudad de México.
Ahora bien, a lo largo de estos 7 años, los grupos de población en situación de vulnerabilidad a los que se ha beneficiado gracias al programa PROSEDE INAI son: mujeres, jóvenes, niños, niñas; población indígena, personas con VIH/SIDA; víctimas de violencia de género; adultos mayores en situación de pobreza; migrantes; población rural (campesinas y campesinos); personas artesanas y comerciantes; comunidad LGBTTTI+; personas activistas, promotoras y defensoras de los derechos humanos; personas en estado de abandono o situación de calle; amas de casa y trabajadoras del hogar; estudiantes de todos los niveles educativos; periodistas; radios comunitarias y culturales indígenas; personas con discapacidad, familiares víctimas de feminicidio; líderes e integrantes de contralorías comunitarias; comités de trabajo comunitario; colectivos y comunidades en defensa del territorio y habitantes de municipios con menor índice de desarrollo humano.
En este sentido, a través del programa PROSEDE INAI se promueve el acceso a la información y protección de datos personales para empoderar a las personas vulnerables. Esto se logra a través de dar a conocer estos derechos a fin de garantizar el acceso a la justicia y, al mismo tiempo, alejar a las personas de las condiciones de vulnerabilidad en la que se encuentran. Lo anterior, bajo la lógica de que, tanto el derecho de acceso a la información como el de protección de datos personales, a su vez, multiplican y detonan otros derechos como los derechos políticos, sociales y económicos. Adicionalmente, es importante señalar que el programa PROSEDE INAI ha contribuido a la profesionalización y el fortalecimiento de capacidades de las organizaciones de la sociedad civil beneficiadas. Además, ha consolidado sinergias de colaboración entre una institución pública como es el INAI y la sociedad civil.
Al mismo tiempo y derivado del actual problema de salud mundial al que nos enfrentamos debido al SARS-CoV-2; el acceso a la información y la protección de datos personales de la población en situación de vulnerabilidad se vuelven todavía más valiosos, principalmente, cuando se habla del derecho a la vida y a la salud. En este sentido, el reto actual del PROSEDE INAI, en su edición 2021, pretende que las organizaciones ganadoras se comprometan a difundir y salvaguardar el derecho acceso a la información como una práctica vital para la población mexicana.
A la fecha, los proyectos del programa PROSEDE INAI 2021 se encuentran en plena implementación, por lo que se llevan a cabo talleres, conferencias, foros, debates, mesas de trabajo, actividades didácticas, entre otras, las cuales se desarrollan de forma presencial y también virtual. Al respecto, dichas actividades reciben oportuno seguimiento y difusión por parte del Instituto. De igual manera, se tiene programado realizar acompañamiento presencial para constatar resultados y vislumbrar los impactos positivos que este programa ha traído consigo a determinados sectores de la población.
Finalmente, el Programa PROSEDE INAI, es la prueba de que, a través del trabajo estratégico, coordinado y cooperativo con la sociedad civil organizada, se fortalece la participación e inclusión de grupos en situación de vulnerabilidad; por lo tanto, el reconocimiento social y de participación en actividades de este sector es trascendental para los retos que actualmente se enfrentan en México.
* Director de Vinculación con la Sociedad del INAI.